Valeroso bombero ecuatoriano
que siempre listo estás,
a la llamada de emergencia
que la sirena la alerta da
Con firmeza y diligencia
te apresuras por llegar,
para con tu presencia
al contingente apoyar.
Siempre listo y preparado
ante el enemigo voraz,
que sin previo aviso a llegado
a destruir sin piedad.
Pero erguido de valor
de sacrificio y generosidad,
ofrendas hasta tu propia vida
por ayudar a la humanidad.
Con valentía y coraje
te enfrentas al enemigo voraz,
para darle dura batalla
hasta llegarlo a exterminar.
Silenciosa es tu labor
y grande tu sacrificio,
que sin esperar recompensa
con decisión cumples tu oficio.
A cambio recibes críticas
agravios y muchas ofensas,
pero en ti nada quita
que sigas en la lucha intensa
Pues socorres al rico y poderoso
al pobre y desvalido,
con esfuerzo grande y valeroso
por la satisfacción del deber cumplido.
Dios bendiga tu labor
y bendiga tu sacrificio,
que te llene de pundonor
y el premie tu sacrificio.
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