Si soy feliz
es porque te tengo madre
porque junto a ti
soy un hombre muy alegre.
Porque eres la compañera
que por siempre guía mi vida,
porque eres noble y sincera
y de mi corazón la preferida.
Dios me ha dado a ti querida madre
como el regalo más preciado,
porque ni con todos los tesoros de la tierra
podría comprar el amor que me has dado.
A veces me pongo a pensar,
qué haría sin tu compañía,
quizá me llenaría de pesar
y mi vida perdería toda alegría.
Y es por eso madre querida
que no podré vivir sin ti,
porque eres el motivo de mi vida
que me das consuelo y alegría sin fin.
Porque eres una mujer humilde y santa,
poseedora de un tierno corazón,
y es por eso que mis labios te bendicen
con sentimiento y con pasión.
Porque con tu manos buenas y lindas
luchaste y luchas por mí
por dar a tu hijo un mundo de alegría
y que siempre sonría junto a ti.
Empiezan a blanquear tus cabellos
por la difícil tarea que tuviste que cumplir,
llevando a tus hijos por buen camino
y así siempre verlos sonreír.
Por eso tú, eres mi madre querida
mi alegría, mi sonrisa y el deseo de vivir,
pues siendo la piedra angular de mi vida
me enseñaste a sufrir pero también a sonreír.
Y ahora para concluir,
quiero decirte que te amo tanto
que nunca quiero verte partir
pues mi vida sería de tormento y llanto.
Que dios te bendiga madre mía
en la tierra y en lo alto del cielo
que te de paz, ventura y alegría
y llevarte siempre en mi pensamiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario